Rasgamos el tapiz del tiempo con el filo de nuestras motos para viajar a una edad legendaria, en la que la recompensa por matar a un dragón era el beso de la mujer amada…
A la conquista de nuevas rutas partieron seis Caballeros y dos Doncellas, con ritmo tranquilo y buen andar.Abriendo la marcha el ilustre regidor de Madrigal de las Altas Torres y su Doncella Maria, bonito pueblo ...
que conocimos al final de tan lustrosa ruta, a su estela los Bizcochos de la comarca de Béjar perdón los Vizcondes José Ángel y Teresa en qué estaría pensando...
...acompañado por el Varón de Bilbo, el Conde de Gata, el Señor de las tierras de Nuevo Amatos y servidor Barón de Iberia y del Duero relatando tan ilustres hazañas. La ruta nos llevó por Olmedo y su precioso parque Mudéjar, las tierras de Íscar donde en el interior del castillo una vez tomado, comimos las viandas que aportó la tropa regadas con cerveza artesana que se produce en el Castillo, partiendo a la busca de café hacia el Castillo de Coca y rematando la ruta el precioso pueblo de las 80 torres, Madrigal de las Altas Torres. Transcurrió la jornada tranquila sin Orcos envidiosos montados en sus dragones de tres ruedas que perturbaran la marcha o los corceles "r" que suelen alterar el ritmo de ella.
Y así fue como lo vivió tan escaso narrador.
Allá todo el mundo con sus prisas, con sus patadas y con sus gritos. Los Meseperos somos tropa de otra pasta y nos distinguirá la mesura el compañerismo y nuestro andar tranquilo.
Crónica dedicada al ilustre narrador oficial de MSP D.Luis Decongorra.
Igualicos igualicos
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